El
consumo excesivo y la obesidad, sobre todo en los países industrializados,
amenazan no solo la salud de los individuos, sino también la misma
sostenibilidad de la Tierra, según lo alertó un estudio presentado en la
conferencia Río+20. La investigación elaborada por la Escuela de Higiene y
Medicina Tropical de Londres (LSHTM, por sus siglas en inglés), y titulada ‘The
weight of nations: an estimation of adult human biomass’ (El peso de las
naciones: una estimación de la biomasa humana adulta), confirma que la
población de Estados Unidos es la que presenta mayor sobrepeso del planeta. De
hecho, para que la población mundial tenga el mismo índice de biomasa entre
personas de la misma edad que Estados Unidos, debería incrementarse en 58
millones de toneladas, lo que equivale en total a 935 millones de personas. El
aumento de la biomasa mundial por obesidad incrementa a su vez las exigencias
de energía en 261 kilocalorías al día por adulto, lo que equivale a los
requisitos de 473 millones de adultos. El estudio, presentado al cierre de la
Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible, conocida
como Río+20, advierte que la energía necesaria para mantener la biomasa creada
por la obesidad agrava los problemas ecológicos causados por el aumento poblacional.
Los investigadores calcularon la energía alimentaria requerida para sostener la
biomasa usando una fórmula y datos de la Organización de las Naciones Unidas
para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Ian Roberts, profesor de
epidemiología y salud pública en la LSHTM y autor del estudio, alertó que la
obesidad es una amenaza tan grande para el ambiente como la superpoblación. “La
gente tiende a pensar que la mayor amenaza para el ambiente es la creciente
población en los países en desarrollo. Pero esta medición de la biomasa es más
relevante”, dijo Roberts. “Al considerar cuántas personas puede sostener el
mundo, la pregunta no es cuántas bocas hay que alimentar, sino cuánta carne hay
que alimentar”, añadió. El estudio estima el promedio de biomasa mundial en 62
kilogramos. Los estadounidenses y canadienses en conjunto pesan en promedio
80,7 kilos, y los europeos un promedio de 70,1 kilos. La investigación además
señala que, a pesar de solo constituir cinco por ciento de la población
mundial, Estados Unidos responde por casi un tercio del peso mundial debido a
la obesidad. En contraste, Asia es hogar de 61 por ciento de la población
mundial, pero solamente representa 13 por ciento del peso de los habitantes del
planeta. El estudio sugiere que la tendencia mundial al aumento de la biomasa
tendrá serias implicaciones en los recursos. El incremento del índice
recargaría las fuentes de energía del planeta en forma equivalente a la que lo
harían 473 millones de personas. Roberts señaló: “Tratar la gordura de la
población podría ser fundamental para la seguridad alimentaria mundial y la
sostenibilidad ecológica”. El científico señaló que las personas hoy no comen
más que hace 50 años. El principal problema, dijo, es que “no movemos nuestros
cuerpos tanto, pero estamos biológicamente programados para comer”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario